Qué es una remachadora y cómo se utiliza

Remachadora: definición y usos

La remachadora es una herramienta de tipo manual que se caracteriza por su practicidad en ciertos trabajos. Además es una herramienta muy económica. Podría parecerse a unas pinzas, no obstante su tamaño es mayor. Lo habitual es encontrarlas en talleres de carpintería o de mecánica.

Su uso se destina principalmente a la unión de dos piezas, que van a quedar fijas, mediante un remache determinado que decidiremos según el espesor del material que unamos. Un remache es la pieza que permite que las dos partes se unan, pudiendo unir un mismo material o distinto. Los remaches pueden ser de varios tamaños, simplemente tendrás que tener claro el tamaño de los orificios que quieres unir para escoger el remache que más se adecúe.

Debes tener muchísimo cuidado cuando la utilices. Es importante que protejas tus manos con guantes adecuados para evitar posibles lesiones cuando la herramienta se cierre. 

Cómo usar una remachadora

Como comentábamos en el apartado anterior, la remachadora es una herramienta manual muy sencilla de utilizar pero debes ser muy cauto a la hora de emplearla. Si no tienes el suficiente cuidado puedes dañarte las manos ya que al aplicar la fuerza con la misma, se ejerce mucha presión.

Si no tienes muy claro cómo se usa una remachadora a continuación te damos algunos consejos para que la utilices correctamente y de la forma más segura.

1. Protección en el bricolaje ante todo

Lo primero que debes hacer es protegerte las manos con guantes de protección. También te recomendamos que te pongas unas gafas de protección para evitar que cualquier elemento invada tus ojos. Los remaches suelen ser de metal ligero y en ocasiones, por la fuerza que ejercemos con la remachadora, pueden romperse y saltar virutas.

2. Coloca las dos piezas a unir

Realiza los orificios en las piezas que vayas a unir; puedes hacerlo con la herramienta que mejor le convenga al material que utilices. Coge las dos piezas que vayas a remachar y coloca una sobre otra de manera que coincidan los orificios de unión.

3. Cargamos la remachadora con el remache

Con una mano sostén la remachadora y activa el gatillo que te permitirá que los brazos de sujeción se extiendan y abran. A continuación coge el remache que hayas seleccionado y colócalo en la parte posterior de la herramienta; aplica tanta fuerza como te sea posible para que quede bien encajado. Una vez te asegures de que está bien ubicado puedes soltar el gatillo, verás que si lo has colocado bien se mantendrá en su lugar sin problema

4. Todo listo para colocar el remache con la remachadora

Coge la cabeza del remache e introdúcelo por los orificios de las dos piezas que colocaste en paralelo en el paso 2. Debes asegurarte de que el remache se introduzca por los dos orificios para que la unión sea efectiva. Para colocar el remache, empuja hacia abajo y tira del mango de la remachadora hasta que notes que la herramienta ofrezca resistencia. En ese momento suelta el mango de la remachadora; deberás escuchar un ruido, eso será lo que te indique que el remache está correctamente colocado.

Ya sabes qué es una remachadora y cómo se utiliza. Cómo verás su aplicación no es muy compleja pero debes tener mucho cuidado de no dañarte al utilizarla. La remachadora se suele emplear en varios tipos de materiales, desde tela hasta metal.

¡Tú escoges cuándo es el mejor momento para emplearla!