¿Sabrías cómo escoger un buen barniz para tu proyecto?
Es importante saber qué barniz puede venir mejor para el tipo de trabajo que estemos haciendo. Escoger el adecuado pemite dar el toque definitivo a una gran proyecto. El barniz es una disolución de una o más resinas en aceite y que aplicamos para proteger una superficie de la acción erosiva de elementos como el agua o el viento. Los disolventes que se utilizan para fabricarlos son: goma laca, poliuterano, agua, nitrocelulósicos...
En el caso de la madera ayudan a sellar el poro lo que da mayor protección e impermeabilidad a la pieza.
SINTÉTICO VS ACRÍLICO
Una primera diferenciación entre tipos de barnices la encontramos entre los acrílicos y los sintéticos:
- Barniz acrílico: del primer tipo destacan por disolverse en agua con sencillez. También se secan muy rápido, si se quiere que ofrezcan una gran protección, habrá que aplicar diversas capas.
- Barniz sintético: es la opción ideal cuando se quiere un acabado resistente. Se secan una vez transcurridas 4 ó 5 horas. Si se quiere aplicar otra capa hay que esperar entre 18 y 24 horas.
Por ejemplo, si vamos a trabajar con un mueble que vaya a tener mucho uso, mejor será utilizar un barniz acrílico.
¿BRILLO, EFECTO MATE, SATINADO?
Otra cuestión a tener en cuenta para elegir el barniz es el tipo de acabado que ofrece:
Barniz tipo brillo: así potenciaremos el color de la madera.
Barniz tipo mate: bastante resistente, muy útil para puertas y ventanas.
Barniz tipo satinado: es el punto intermedio entre los dos anteriores. Suele utilizarse para suelos.
¿CON COLOR O SIN?
Primero de todo, debemos tener presente qué no interesa: si queremos realzar la veta de la madera o disimularla. En el caso de la primera opción, convendrá utilizar un barniz incoloro. Si se opta por la segunda opción, podremos escoger un barniz con color. Esta segunda elección suele darse para maderas sin tratarse y que vayan a estar en el exterior.
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